La historia y elaboración del Tequila Sauza Blanco
En 1795, las autoridades virreinales autorizaron por primera vez la producción y venta del tequila. Fue en ese año cuando se otorgó una concesión real para la elaboración y comercialización de esta bebida, y a principios del siglo XIX, José María Castañeda fundó la destilería "La Antigua Cruz", que más tarde sería adquirida por Cenobio Sauza en 1873. Cenobio renombró la destilería como "La Perseverancia", fundando la famosa Casa Sauza y comenzando la exportación de tequila a Estados Unidos, enviando tres barriles y seis botijas.
El legado de la familia Sauza
Bajo la administración de Cenobio Sauza, y posteriormente de su hijo Eladio y su nieto Francisco Javier, la firma Sauza se consolidó como una de las marcas de tequila más reconocidas en México y el mundo. Hoy en día, Casa Sauza colabora con 600 proveedores de agave, desde pequeños productores hasta grandes ejidatarios que han trabajado con la marca por más de 50 años. Además, la empresa posee extensas plantaciones de agave, permitiendo mantener una producción constante y realizar estudios para mejorar los cultivos.
Proceso de elaboración del Tequila Sauza Blanco
Con 125 años de experiencia en el mercado, los tequilas de Sauza siguen un meticuloso proceso que comienza en el campo, con la cuidadosa selección y jima de la piña de agave bajo la supervisión de jimadores expertos. Antes de la jima, las puntas de las pencas de agave se cortan para concentrar los almidones en el corazón de la piña, asegurando la calidad del agave.
Una vez jimada, la piña se tritura en pedazos pequeños en un molino, permitiendo que los azúcares se distribuyan homogéneamente. Luego, el agave es sometido a una hidrólisis a temperaturas uniformes para garantizar un cocimiento parejo, lo que facilita el posterior proceso de fermentación.
Fermentación y destilación de Sauza Blanco
La fermentación de las mieles del agave se realiza con levaduras seleccionadas, especialmente desarrolladas en los laboratorios de Sauza, lo que garantiza una conversión más eficiente y uniforme de los azúcares en alcohol.
Después de la fermentación, el líquido obtenido, conocido como mosto, está listo para someterse a una doble destilación en alambiques pequeños. En la primera destilación se obtiene el "tequila ordinario", mientras que en la segunda destilación, o rectificación, se obtiene el tequila rectificado. Durante este proceso, las "cabezas" y "colas" del destilado son desechadas para asegurar la calidad del producto.
El resultado: Tequila Sauza Blanco
El tequila rectificado se deja reposar para estabilizarse y, una vez finalizado este proceso, se obtiene el extraordinario Tequila Sauza Blanco. Este tequila, con un sabor suave y auténtico, es el resultado de un proceso artesanal perfeccionado a lo largo de más de un siglo de tradición.